Primer Día de Clases (Academia Ninja)

(Fecha 3)


Las llamadas de atención se empezaron a escuchar en toda la Academia, dando aviso que las Primeras Clases de los estudiantes serían en unos segundos. Zero estaba recostado sobre una de las paredes del pasadizo, descansando con los ojos cerrados antes de entrar al salón, para comenzar la clase. Como de costumbre tomaba las cosas a la ligera, pero era sumamente responsable en cuanto a lo que tenía que hacer.

Se dirigió hacia su respectivo salón con algo de prisa, puesto que le incomodaba la idea de llegar tarde. Una vez allí, tocó la puerta ligeramente con la mano derecha, pidiéndole permiso al profesor para poder pasar. Al entrar al salón, miró un lugar vacío y calmado, pensando que era el lugar más adecuado. Pasó caminando con su mochila en su espalda, entre varias de las carpetas amontonadas que se podían ver. Tenía una mirada fría que se reflejaba en sus ojos, puesto que había muchas personas como para su agrado, tampoco soportaba el fastidioso ruido que se creaba a su alrededor. Pero era una persona calculadora en cuanto a sus emociones, así que no le dio importancia a ello y se ubicó sentándose en la carpeta que había escogido para su centro de estudios, dejando su mochila colgada en el respaldar del asiento.

Luego de unos minutos la clase dio comienzo con la presentación del profesor, lo cual era algo necesario, supuestamente. Realmente Zero no estaba para perder su valioso tiempo en esa clase de tonterías, así que decidió adelantarse a sacar uno de los libros del curso, comenzando a leerlo en silencio, hasta que terminase la presentación del profesor. Tiempo suficiente para que pudiera saber algo del tema y cuando el profesor preguntara algo, supiera darle una buena respuesta con anticipación. Una vez terminada la presentación del profesor, éste decide comenzar con algunas cosas básicas como: Definición del Chakra, Clases de Jutsus, Manejo de Armas. Entre otros detalles importantes. Obviamente Zero supo responder perfectamente cada pregunta y ejercicio que hacía el profesor en la clase.

Las horas fueron pasando lentamente, a medida que el profesor seguía preparando a los estudiantes. De pronto, sonó la campa de salida de la Academia, mientras que los estudiantes salían apresurados. Zero tomó su mochila con sus cosas, retirándose tranquilamente del salón de clases y despidiéndose del profesor educadamente. Salió por la puerta sin hacer el menor ruido, pasó por el pasadizo dirigiéndose hacia la Puerta de Salida de la Academia. Estando allí, abrió la gran puerta y se fue caminando con las manos en los bolsillos hacia su hogar, puesto que más tarde tendría bastante trabajo por realizar.